Génova, capital de la Liguria, es una ciudad misteriosa, con una larga historia. Es la sexta ciudad más grande de Italia y es un lugar eclesiástico y festivo. De calles estrechas con trazados medievales y callejones, donde también están los más importantes edificios de la ciudad, hoy transformados en museos y galerías de arte. En este ambiente creció parte de esta familia de inmigrantes que se radicaron en Chile, sin olvidar jamás estos parajes y los sabores, que magistralmente ofrecen en su emporio en Concón.
El comercio ha estado desde siempre en las familias Lagomarsino y Ceccati. Gian Franco Lagomarsino desde muy pequeño comenzó a trabajar en el emporio de su padre, haciéndose cargo de él años después, llegando a tener 3 establecimientos en la ciudad de Génova. Por su parte Claudio Ceccati adquirió experiencia en su propia fábrica de elaboración de pastas frescas, fideos, salsas, pan, pizzas y postres, todos con recetas italianas principalmente genovesas e incorporando preparaciones tradicionales, familiares y típicas de la zona de la Liguria di Levante. Más tarde y ya en Chile, se incorporó Pedro Rodríguez Viladoms, con experiencia en hostelería y restaurantes, se encargó de la organización comercial tanto en las relaciones con privados como con los organismos locales gubernamentales, para dar marcha al proyecto en común.
Un 9 de mayo de 2020 abrieron Emporio Lagomarsino “tiene este nombre porque Gian Franco es el socio principal. Además, que su padre en la década de los 30 se estableció en Valparaíso con un emporio, aunque más tarde retornó a Italia a raíz de la segunda guerra mundial. Con este nombre, hacemos también un humilde homenaje a un sinnúmero de inmigrantes italianos avecindados en Valparaíso, Viña y en todo Chile”, explicó Pedro.
Si bien la apertura fue en plena pandemia, comentaron no estar muy seguros de cómo les ha afectado. “Comenzamos nuestras actividades en mayo, es decir en medio de la llegada del Covid. Si le sumamos los difíciles momentos vividos a partir de octubre de 2019, sólo nos queda seguir trabajando y mejorando y es lo que hemos hecho”.
Cabe mencionar que antes de dar con el local perfecto, durante un largo tiempo buscaron en Viña del Mar, sin resultado. La idea era construir un establecimiento con características muy definidas, con cocina a la vista, zona de venta de salumería y quesos italianos, de importación propia, sumándole la venta de pastas frescas, pizzas, platos preparados y café verdaderamente italiano. El paso siguiente, en el proyecto original, sería continuar con la actividad de restaurante. Para lograr lo descrito, escogieron buscar un local abierto, sin intervención anterior y que permitiera desarrollar el plan a cabalidad. Lo consiguieron en el Boulevard Montemar en Concón, placa comercial que les recibió de hecho como los primeros ocupantes.
ESPÍRITU DEL ANTIGUO EMPORIO
El local tiene una arquitectura simple, donde predominan la calidez de sus revestimientos, en tonos marrones lo que se mezcla con el moderno diseño de la zona de salumería. “Todo para rememorar un emporio del ayer, pero con toques contemporáneos apoyándonos en luz cálida que cae desde nuestras 27 lámparas cobrizadas”, mencionó Pedro. Al ingresar destaca la cocina a vista, “la idea surgió porque es correcto que los clientes tengan la oportunidad de ver cómo tratamos los productos”.
Con este nombre, hacemos también un humilde homenaje a un sinnúmero de inmigrantes italianos avecindados en Valparaíso, Viña y en todo Chile”
“Nuestros servicios privilegian el uso de recetas e ingredientes italianos con estándares muy exigentes. Recurrimos a insumos naturales, todo bajo un marco de cercanía con nuestros clientes con lo que intentamos rescatar el espíritu del antiguo emporio o almacén del barrio”, puntualizó Gian Franco. Acotó que el objetivo es importar productos italianos de primera calidad y preparar todo lo que cocinan en la tradición de las recetas italianas y con esos ingredientes, de la misma manera que los preparan en casa. “Por eso nuestros productos no contienen ningún tipo de preservantes, colorantes, aditivos ni grasa artificial, usamos solo aceite y mantequillas”, aportó Claudio.
La cocina es liderada por Claudio Ceccati, nacido en Rapallo, quien ha estado ligado a la gastronomía genovesa desde muy joven. Ha participado en negocios familiares, propios y en colaboración con otros chefs italianos, incorporando a su repertorio de recetas otras de diversas zonas de Italia. Sus primeros estudios estuvieron relacionados con la agricultura, sin embargo, en su corazón siempre reinó la cocina por lo que ha dedicado su mayor esfuerzo a ella.
“Podemos clasificar nuestro estilo gastronómico como el de conservación y rescate de la cocina más tradicional, incluso familiar y genovesa. Eso sí con predisposición a incluir costumbres locales, ingredientes que se van descubriendo y que de algún modo enriquecen nuestras recetas” dijo.
En el emporio se pueden disfrutar las preparaciones en sus mesas interiores, exteriores, en formato delivery o take away. Destacan la Focaccia Cipolla, Focaccia Pomodoro, Focaccia Semplice, Focaccia Rellena, todas con base de harina, levadura. Malta, agua, sal y aceite de oliva más cebolla, tomate, prociutto y quesos según la variedad de focaccia ($5.500 a $9.000).
“Podemos clasificar nuestro estilo gastronómico como el de conservación y rescate de la cocina más tradicional, incluso familiar y genovesa”
La carta de pizzas es variada, está la Pizza Al Taglio (Pizza al corte) la masa es más robusta de harina blanca, integral, levadura, malta, agua, sal y aceite de oliva ($6.500); Pizza Pimba; salsa de tomate, mozzarella, jamón crudo, rúcula, parmesano y aceite oliva; La Capra, salsa de tomate, mozzarella, zapallo italiano asado, champiñones, salsa de brócoli y pimienta; la Pizza Palta, salsa de tomates, mozzarella, gorgonzola, salsa de nueces y nueces y Pizza Giardino, salsa de tomate, zapallo italiano, pimentón, betarraga cebolla y alcaparras ($9.500 mediana a $19.500 familiar). En pastas, los Ravioli Ripieni con carne y espinaca, Pansoti Ripieni con espinaca y queso ricotta; Papardelle, Fetuccini, Spaghetti ($5.500 a 9.900) con Salsas Quattro Formaggi, Noci, Pomodoro, Ragú o Pesto ($8.000 a $18.000). También la Lasagna de berenjena, bolognesa, champiñón o pesto ($4.500 individual a $20.000 familiar). En panadería existe Ciabatta, Pan-Zano (semi integral) y Pan-Rico relleno con salame y pancetta ($1.300 a $6.500) y se ofrece un par de hamburguesas con papas rústicas ($9.500 y $12.000).
En postres: Tiramisú, Gelato, Pannacotta, Torta al Limón, Canestrelli; pan Dulce Genovés con harina, huevo, mantequilla, pasas, fruta confitada, esencia y leche; Pizza Dolce con Lagotella, frutillas, arándanos y uvas ($4.000 a $13.400) y más.
Al ser un emporio se suman a todos los productos mencionados para servirse en el local, varios que también se pueden llevar “como importadores, nuestra cocina se apoya en salumería italiana de Fratelli Coati y de Genaro Auricchio, productores de larga data de embutidos y quesos de alta calidad. Destacamos nuestros Prosciuttos o jamones crudos, Parma, Disossato y el Speck y nuestro crudo ahumado. También los diversos tipos de salames, Napoli, Campagnolo, Spianatas piccante, jamones cocidos tales como Cuore Nobile, a las finas hierbas, con trufa. No podemos dejar de mencionar nuestras pancetas, la mortadella tradicional italiana, la Porchetta, embutido de cerdo asado. Así mismo contamos con quesos de diversas naturalezas, de vaca o de oveja entre los que podemos destacar el Provolone dolce o Inforna e gusta, especiales para fundir. Los Gorgonzolas, dolce o piccante, el Taleggio, Mascarpone y los Pecorinos (oveja) Romano, Tartuffo (trufado) Calcagno de sabores intensos o las cacciotas, ovina novella, peperoncino, la Mista, el Saracino, el Asiago, quesos sabrosos de intensidad media a suave. Y nuestra última adquisición, la Caciota del Pirata con las que sorprenderemos a nuestros clientes. Para el final dejamos los más tradicionales y conocidos, Grana Padano, maduro intenso de 10 a 20 meses de guarda y los Parmigianos que han sido madurados hasta por 38 meses, productos particularmente apreciados por acompañar pastas o para ser degustados directamente”, describió en detalle finalmente César Rodríguez Lagomarsino, director de comunicaciones.
Así, con una cálida atención han logrado que cada visitante a este emporio se traslade a Génova, ya sea por los aromas, por el acento de algunos de sus dueños, la ambientación y, por cierto, por los auténticos sabores de sus productos y recetas.
Emporio Lagomarsino
Avenida Concón-Reñaca 4000, local 1 ConcónDelivery: +56 9 6353 3700
Horario: martes a sábado de 10:00 a 22:00
domingo de 10:00 a 17:00 – lunes cerrado
Instagram: @emporiolagomarsino
Facebook: @Emporio-Lagomarsino
Web: www.dalagomarsino.cl