Ya estamos en circuito con la 8a versión de Premios Fuego, iniciativa que nace con el espíritu de testimoniar a quienes realizan un aporte a la gastronomía chilena con una mirada patrimonial. Hoy, más de 60 empresas, organizaciones y profesionales han sido reconocidos por su contribución a lo nuestro, a nuestras riquezas, a la herencia culinaria, a fortalecer nuestro quehacer, donde todos son valiosos y cada uno, así como muchos otros, contribuyen a la grandeza de nuestra cocina chilena.
Cuando surge esta idea en el año 2016, queríamos que la gastronomía estuviese incorporada (como ocurre en países más desarrollados) a la cultura y este reconocimiento figurara al lado de los premios a literatura, artes o ciencias. Fantástica idea, estábamos convencidos, y junto a mi querido amigo Felipe Yáñez, nos dimos la tarea de golpear puertas, partimos en ese entonces con Consejo Nacional de la Cultura y las Artes, donde fuimos muy bien recibidos y luego de varios meses, nos indican que no tendrían los presupuestos para apoyar esta iniciativa y llevarla a cabo. Entremedio surgieron otras distinciones que apuntaban a reconocer a restaurantes y chefs, con bastante efecto mediático y presupuesto, cosa que no nos desalentó. A fines de 2016 y sin siquiera sopesar todo el trabajo que nos llevaría, gestionar, organizar y producir un evento de esta magnitud, además siendo novatos en este tipo de acontecimientos, comenzamos a realizar gestiones con empresas, deben haber sido unas 30 reuniones o más, dejábamos a todo mundo convencido para que luego de unas semanas nos indicaran que esta vez no podrían apoyarnos. Devastador. Parecía que no se podría esta vez, buscábamos explicaciones, no queríamos nada para Fegach, o para nosotros, queríamos hacer un reconocimiento para lo nuestro, no entendíamos por qué no estaba resultando.
Estábamos llegando a inicio de marzo del 2017 y fue entonces que aparecieron los amigos y empresas; Nestlé y Viviana Gutiérrez, Steward en esa época Rodrigo Rojas y nuestros amigos de Carozzi Food Service, Cristian Valdés, a quién no fue fácil convencer, actualmente la marca ha estado presente en todas las versiones y camina al lado de Fegach y sus proyectos. Así que, con mucho ingenio, fortalecimos las ideas y el plan que ya veníamos trabajando para este evento, muchos conceptos teníamos aterrizados, cómo olvidar a Gonzalo Aranda quien nos ayudó con el diseño del galardón e imagen para que luego Dupla, Fernando Araya y Felipe Gutiérrez le dieran forma visual a todo, Fundación Telefónica llegó en el momento oportuno, y nos apoyó con sus instalaciones, haciendo de este evento justo lo que queríamos. Muchas voluntades se alinearon para llevar la primera versión de Premios Fuego el apoyo de las instituciones de educación para el coctel de la Gala de premiación fue vital Santo Tomás, Culinary, Inacap, ITC, Escuela de Sommeliers de Chile y Chefs del Mar, todos dando lo mejor de sí para el éxito de esta iniciativa.
Con la asistencia de 230 personas y la animación de la maravillosa Rosita Parsons, quien nos colaboró desinteresadamente, el 6 de junio a las 19:00 hrs. se realizó la primera Gala de Premios Fuego, el show estuvo a cargo de María Esther Zamora y Pepe Fuentes con sus inigualables cuecas, el momento mágico esperado por el cual veníamos trabajando desde un año y medio tenia a sus primeros 10 galardonados, felicidad, registros únicos, muchos abrazos, orgullo por nuestra cocina, corazón llenito y luego de unos minutos “luego del achique” ya estábamos pensando en la próxima versión.
Hoy, tenemos la misma energía, y naturalmente muchas cosas van cambiando, sabemos que no es fácil encantar, deseamos tener más candidatos en todas las categorías y seguir premiando por muchos años más. Es un honor poder distinguir y poner en un lugar de privilegio a quienes realizan un aporte a nuestra cocina, a sus profesionales, a las organizaciones y empresas, a la gastronomía de los territorios, conocer historias nuevas, reconocernos y valorarnos, tal como se lo he escuchado a chefs, colegas de distintas disciplinas, Premios Fuego es la gran casa donde todos son bienvenidos, reúne a todos quienes queremos lo nuestro, quienes nos sentimos orgullosos de nuestro oficio, a todos quienes llevamos “LA COCINA CHILENA EN EL CORAZON”.