Hace unos días, las autoridades económicas, anunciaron un proyecto de ley destinado a generar incentivos para el sector turismo, entre los que se cuenta la posibilidad de hacer películas extranjeras exentas de IVA para todos los servicios que contraten en Chile.
Se trata de una excelente señal para traer inversión extranjera y para la promoción turística de nuestro país que debiera ser apoyada por todos los sectores políticos y que además debiera ser acompañada por otras leyes que fortalezcan la seguridad, dado que hoy es un talón de Aquiles para nuestra imagen internacional.
Con todo, habiendo obtenido en varias oportunidades el reconocimiento en los World Travel Awards del mejor destino verde del mundo, así como el mejor turismo aventura y destino romántico de Sudamérica, las locaciones naturales de Chile para las producciones audiovisuales constituyen un atractivo importante que generarán competitividad frente a otros países que ya nos llevan la delantera.
Colombia, con niveles similares a Chile en su aporte del turismo al PIB y que está buscando un posicionamiento internacional, tiene un foco importante en la economía naranja, es decir, aquella relacionada con el arte, la creatividad y la cultura. Es así como con una ley que existe desde de 2012 otorga certificados de inversión audiovisual proporcionando incentivos fiscales a los inversionistas que financian proyectos audiovisuales calificados en el país y el Fondo Fílmico de Colombia invita a rodar en ese país devolviéndole a los productores un porcentaje del valor invertido. Bajo estas condiciones es que Netflix, por ejemplo, lleva más de 10 años realizando series y películas en ese país y desde 2021 tiene oficinas en Bogotá con más de 30 producciones anuales según información de la misma empresa.
Entre los países anglosajones, Canadá ofrece varios programas de incentivos fiscales y créditos para producciones cinematográficas, como el Canadian Film or Video Production Tax Credit (CPTC) y el Ontario Film and Television Tax Credit (OFTTC). Estos están enfocados en producciones canadienses con ciertos criterios de elegibilidad asociados a garantizar el sello local. Por otra parte, Nueva Zelanda que al igual que Chile es conocido por sus paisajes, también ofrece incentivos fiscales y beneficios para la producción cinematográfica, lo que lo convierte en un destino popular para rodajes de películas y series. En la misma línea Australia, tiene disponible incentivos fiscales y subsidios a través de Screen Australia e Irlanda con su Irish Film Board y el Irish Film Tax Credit, también apunta al mismo objetivo donde se filmaron películas tan conocidas como Corazón Valiente, donde una parte importante también se filmó en Escocia.
La exposición a los miles de espectadores de cada una de las películas, es la que finalmente se convierte en un atractivo importante para conocer lugares donde se grabaron escenas memorables. Al mismo tiempo, cualquier rodaje tiene beneficios para las comunidades locales al aportar oportunidades de trabajo, así como un movimiento en torno a la hotelería y los restoranes.
Los incentivos para la industria cinematográfica anunciados en Chile, consisten en una devolución de IVA por todos los servicios contratados en territorio nacional por una empresa extranjera de producción audiovisual para lo cual se creará un Registro de productores audiovisuales nacionales, a través de los cuáles la empresa extranjera tendrá la opción de canalizar sus servicios contratados en Chile. Lo anunciado, se complementa con el IFI audiovisual de Corfo, que es un programa de apoyo a inversiones audiovisuales de alto impacto a través de un subsidio que contribuya a aumentar la inversión en esta industria y fortalezca la imagen país. Se contempla un reembolso de hasta 40% para producciones que realicen una inversión mínima de 1 millón de dólares en el país. Todo indica, que en unos años, podríamos ser un país de películas.